viernes, 31 de diciembre de 2010

Mi Xoxu

En la entrada 101 voy a intentar emocionar al cumpleañero con muchos momentos que recuerdo a su lado.

No hará ni pocos años que fuiste el enano saltarín, y ahora, las torres de mujeres que eramos a vuestro lado se han quedado en nada, ya que a casi todas nos pasáis una cabeza jajaja

Recuerdo que en el colegio siempre hemos estado juntos, incluso nos llegamos a sentar uno al lado del otro. Con mi cancioncilla "vamos vamos que nos casamos, ¡vamos!" anda que no te hacía rabiar, hasta el punto de que una vez nos quedamos sin recreo por decisión del Joaquinillo...Hay que ver, si es que no hemos cambiado nada; antes era una cabrita que te tiraba el estuche y ahora una cabrita a secas (o como tú me llamas a secas también: mala).

La verdad que debería agradecerte que no fueras de esos que me hacía moratones en las piernas cada dos por tres, lo nuestro siempre ha sido más vaciles, pero ahora está claro quién vacila a quien ejem ejem...Que últimamente estás finico finico majo, aunque sé por tus ojos que no lo haces con malicia, pero quizá por venganza sí ehhh jaja ¿Qué habré hecho yo al género masculino? (ironía, sí)

A lo mejor hoy no puedo acompañarte en la juerga de tu cumple/nochevieja, pero lo que quiero que sepas es que estoy todos los días, no en alguno concreto. Eres de las personas más bondadosas que conozco, por eso la confianza que tengo contigo es inmensa. Por lo tanto sabes que nunca te hace falta preguntarme que qué me pasa, te miro a los ojos y las palabras me salen solas (vamos, como siempre, pero contigo salen más fácilmente eh jajaja).

Y que sepas que tus abrazos son unos de los que más valoro, no ves que no me abrazas casi nunca...por eso cuando estoy encerrada entre tus brazos me siento arropada por mucho cariño.

Solo me queda decirte que me ha encantado estar a tu lado esos 15 años que llevamos juntos, que aunque casi nos llevemos un año yo te considero un chico casi tan maduro como yo jajaja (chistaco). Hoy en cuanto te vea te daré 17 abrazos, nada de tirones de oreja, así sentirás todo el cariño que he acumulado hacia ti durante estos años en unos pocos minutos.

ZORIONAK COSA GUAPA GUAPA!!!!! TE QUIERO (algo que nos decimos poco, pero mejor, así cuando se suelta se agradece más)

lunes, 27 de diciembre de 2010

Me confieso

Y las personas que me han dicho "te quiero" y este es de verdad, sé que no me abandonarán por mí, si no quizá por las circunstancias que ocasione la vida; entonces me da igual ser natural, nunca me hace falta actuar, no hay miedo a que se alejen de mí, saben cómo soy y aún así me quieren (¡qué locos/as! jajaja).

Es tontería callar ahora, adornar mis gestos cuando ser tan expresiva me encanta. Ya no sería la misma y el querer que he conseguido se esfumaría entre cambios.

Confieso que gritar me gusta, no soporto guardar dentro de mí los suspiros, ni mucho menos palabras, tanto buenas como malas; tampoco puedo vivir cabreada, ya que el enfado también lo tengo conmigo misma; revelaré que me encanta llorar sin que me vean, las lágrimas me salen más gordas y la satisfacción de empapar la almohada es mayor; advierto que mis tonterías no hacen gracia, pero me da igual, las suelto para poder reírme de mí misma; no aguanto a las personas que me soportan, si no me aguanto ni yo misma...

Admitiré que muchas de las veces que pido una cosa quiero que la otra persona se dé cuanta de que quiero lo contrario (sí, así soy); cuando llega tiempo de regalos solo quiero como presente la presencia de mi gente; suelo ir por la calle mirando al cielo, porque a veces descubro mucho más que mirando el suelo; he caído muchas veces y quedaron moratones, pero quiero que sepáis y que tú misma lo sepas Laura, que no te rindes con facilidad, que eres cabezona y te gustan los retos (sobre todo los casi imposibles); confesaré también que aunque vaya de tía que se la sopla todo no es así (uyy espero que esto no lo vea mucha gente jajaja).

No puedo despedirme sin declarar que soy una de esas brujas que por desgracia no vuelan, esas que de vez en cuando son crueles, pero que a la vez haría magia para enmendar todas sus maldades.

Muchas gracias por atender a razonamientos que no tienen porque importar a nadie, pero animo a la gente a confesarse, no para que otros/as descubran cosas íntimas tuyas, sino para descubrirnos a nosotros/as mismos/as.

miércoles, 22 de diciembre de 2010

:)



Y vuelvo a preguntarme si no somos demasiado egoístas en la búsqueda por nuestro bien propio, si estamos demasiado ofuscados en esa búsqueda que no podemos ver alrededor y observar que estamos infinitamente mejor que las gentes de otros lugares...

Lugares donde ni siquiera pueden hacer lo que suelo hacer yo por aquí, quejarse, lugares donde su vida no vale nada por los que están encima suya y por lo tanto si les molestan con que no tienen comida en la mesa (cosas mucho más importantes que de las que yo suelo quejarme) se quitan el problema pegándole un tiro...

Y yo quejándome en que no me gusta la política, ni la educación, ni el camino que está cogiendo la gente... Con esto no quiero decir que estos problemas no sean importantes... Pero sí que hay que poner prioridades ¿no? Yo creo que es más importante la gente que no tenga para vivir, más importante incluso que el medioambiente, que es uno de los mayores problemas de la humanidad...


Y los países desarrollados se volcaron con el terremoto de Haití, que aún os acordareis... ¿Pero os acordabais del tsunami del sudeste asiático? Pues NO aunque os acordéis, y aunque mucha gente mandó dinero en esos momentos a esos lugares, ahora el dinero que llega allí que antes durante y después de las catástrofes lo estaban pasando mal vuelve a ser mínimo, y así en dos terceras partes del planeta. SÍ! Todo el dinero para nosotros, así podremos vivir bien y comprando nos olvidamos de los niños que nos cosen estas cosas, de los recursos naturales que estamos robando a los africanos y de los niños metidos en minas de Sudamérica. PUES VALE...


Cierra los ojos e imagínate... en cada uno de esos lugares:


-Viviendo en una chabola de barro, sufriendo sequías en pleno desierto africano...

-Viviendo en una cabaña de madera expuesta a huracanes...

-O viviendo simplemente, como vive la mayor parte de la humanidad.


Si lo hacer puedes amargarte durante cinco minutos, pero está claro que no vamos a cambiar nuestro estilo de vida porque nos hayamos enterado... Seguiremos comprando cosas hechas por niños, seguiremos comprando cosas extraídas de África y cosas que saquen los niños mineros de Sudamérica.


En fin, por lo menos me he desahogado... y gracias por esta canción Lau ;)

domingo, 19 de diciembre de 2010

Mun2

...¿Qué pasa? ¿Dónde estoy? Veo restos de un avión estrellado a mi alrededor, y silencio. Nunca había sentido silencio, siempre ha habido ruidos a mi alrededor: ruidos en mi cabeza de Mun2, o ruidos de máquinas, siempre... Y el silencio me provoca algo que no he sentido nunca, me... preocupa, pero es algo más grande que la preocupación, algo que no había sentido antes, y me asusta, me... intranquiliza.

Espera, oigo algo, parece el chirriar de un motor, pero tiene algo escalofriante.. ¡Lo emite una persona!

-¡Eh chico! Ayúdame, estoy atrapado-me dice.

-¡Un momento! ¡Ya voy!-me acerco y veo que es un piloto de nuestro avión y está atrapado por lo que tenía que ser su sillón, intento levantarlo para liberarlo, pero no estoy acostumbrado a mi cuerpo físico- No puedo... ¡Lo siento!

-Espera chico, busca la radio e intenta pedir ayuda

-Pero... -respondo confundido- ¿Qué es una radio? ¿A quién pido ayuda? ¡En el exterior no existen los agentes!

Pero antes que el piloto pueda responder noto que la sangre me desaparece de mi cabeza, y el suelo se acerca muy rápido... Los ojos me pesan


En el aeropuerto me conecte por última vez a Mun2, por suerte tenían plataformas de conexión alquilables y estuve hablando con mis amigos antes de coger el avión. Uno de mis colegas, un empollón me contó que antes los aviones eran seguros. Pero en nuestra época, como la experiencia dejó de tener valor cuando se inventaron los mundos virtuales, los pilotos son cada vez más torpes.

Recuerdo la misma sensación, el mismo sentimiento que al oír el silencio cuando entré a la máquina de hierro que nos iba a llevar volando, como desapareció esa sensación cuando nos explicó el piloto la experiencia que tenía y como regresó cuando noté que despegábamos...


Vuelvo a abrir los ojos, y me encuentro en una cama, noto algo diferente en la atmósfera, algo acogedor, algo que tampoco había sentido antes... ¡Ahora sí que nos se donde estoy!

Ya no hay silencio, pero lo que oigo no son ni ruidos de máquinas ni sonidos de mi cabeza, me empieza a entrar una nueva curiosidad... lo primero que me extraña es estar en una habitación sin pantalla ni mecanismo alguno... por lo menos a la vista. Cuando me levanto de la cama y me acerco a la puerta, un escalofrío me recorre la espalda. ¡Un montón de niños jugando y corriendo! ¡Sonriendo! Y por lo que veo no hacen nada especial, dictado por unas normas a las que seguir sino que simplemente disfrutan del desgaste de energía, del contacto humano (aunque parece increíble, disfrutan del contacto humano). Yo... no sonreí tanto en mi infancia como estos niños, que sacan una alegría salvaje desbocada a través de carreras y juegos inventados por su imaginación.

¡Imaginación! Eso es un mito en Mun2, donde apenas hay un par de cientos de posibilidades propuestas por los programadores. Y en la infancia todo está dirigido a la educación. Sí, nos divertíamos, pero todo estaba controlado. En la vida real se puede ser libre ¡Libre!


Sí, definitivamente estoy en una cúpula de desconectados... y estaba equivocado respecto a ellos. Yo los veía como personas semidesnudas dándose palos por la poca comida que tuvieran. Pero no, me estoy dando cuenta que ellos viven más y más intensamente que nosotros.

Mun2 parecía real, pero comparado con esto, nuestros avatares eran marionetas. Supongo que el respirar O2 natural me provocará esa sensación acogedora que no he sentido antes, eso, junto al shock postaccidental y las risas de los niños están haciendo que mi vida esté dando la vuelta, estaba totalmente equivocado respecto a Mun2, los Agentes, los desconectados, creo que no quiero volver a mi vida anterior y quedarme aquí... Pero ahora echo de menos algo... Papá, mamá, mis amigos... si quiero quedarme aquí nunca volveré a verles... vuelvo a sentir ese sentimiento de intranquilidad, de brutal preocupación... y recuerdo una charla con mi abuelo, que vivió en su juventud fuera de los mundos virtuales, recuerdo que me contaba cosas, y yo le hacía poco caso... me acuerdo que recordaba con cariño aquellos tiempos... yo creía que deliraba cuando decía que los seres humanos no serían personas cuando olvidaran llorar. Que la gente olvidaría que era vivir si no notaban en sus carnes los sentimientos humanos, como la alegría, el sufrir, el... miedo. Eso es. Miedo es lo que sentía cuando escuchaba el silencio, cuando subía al avión, cuando no entendía donde estaba, cuando entendí que no volveré a ver a mis padres... y sí, ahora entiendo lo que decía mi abuelo... creo que tengo que ir a saludar a esos chicos de mi edad que me dicen que me acerque, pero esperare a que se me sequen los ojos... Cuando termine de llorar. Cuando me acostumbre a sentirme tan vivo.

No es un hobby

Para mí ni siquiera es un sentimiento, no son sensaciones, no es algo que te devuelva a la vida cuando te encuentras entre sombras, es más, mucho más que todo eso.

Ella es la que entrando por tus orejas, consigue ser el PRINCIPIO, la que activa dentro de ti los sentimientos; se percibe mediante el oído, pero lo más acojonante es que la sienten los otros cuatro. Algo que conecta, que te ayuda a liberarte, que te hace llorar o que te excita. Notas de música acompasadas con palabras, a veces de mucho más.

En tres minutos han podido conseguir resumir qué o quién eres tú, canciones que llegarán a formar parte de ti. Las habrás escuchado mil veces y aun así la mil una no te cansará, conseguirá de nuevo que de evadas, que dejes de pensar para sentir. Las de verdad no son como las que escuchamos habitualmente en la radio, esas que tantísimo repiten y que, en cuanto empiezan, inmediatamente cambias de emisora.

La música va más allá de los hit, para mí incluso hasta va más allá de las partituras. Sonidos como el del viento agitador, el de un risa que te cala y consigue arrastrarte, el ruido al pisar hojas marrones y secas de otoño...Descubren mis sentidos y yo les doy la mano para hallarme más cerca de todo esto, algo que no se consigue con un anodino hobby.

Y te encierras en tu habitación, y no estás tan solo/a, das al on, todo empieza mientras a la vez todo acaba para ti tras la puerta. Es increíble encontrar a alguien que te acompañe para apagar el mundo mientra enciendes tu música, quien sienta lo que tú, o incluso de una misma letra saque diferentes cosas que te ayuden a ver no tu realidad, sino la de los/as dos. Y compartir lo infinito, como lo es esto, supone no quedarse nunca sin nada, así que nadie tendría que poner impedimentos en el arte de escuchar.

domingo, 12 de diciembre de 2010

Escucha

Morderte la lengua, tanto que a veces te tiene que saber la boca a sangre. Retener palabras que quieren salir por todos los medios. Esa señorita que siempre va en coche y siempre va mojada, me pide que suelte su cinturón de seguridad, quiere moverse.

No tener voz, no poder expresarte. El peor de los sufrimientos es aguantar, retener...todo se va guardando, como el que colecciona polvo en sus estanterías, si no las limpias cada vez se llenan más.

Suele ser difícil atar en corto a tus sentimientos e impresiones, pero la educación hace de cuerdas gruesas, capaces de asfixiar a las palabras. No es correcto decir esto, hablar usando lo otro, contar, relatar lo que llevas dentro. ¡Menudo caos sería saber qué llevamos todos/as dentro! O tal vez es una suposición, porque acerca de este tema no hay nada empírico. No nos atrevemos a escuchar las entrañas de los demás, miedo al saber, o a confirmar lo que sospechábamos.

¿Cierra los ojos? NO, también tapa tus orejas. Creemos conocer sin ver y sin escuchar.

jueves, 9 de diciembre de 2010

Espantapájaros

Vacío, lleno gracias a paja seca, restos que nadie quiere o necesita; aprovechados los viejos recuerdos de un agricultor se viste a esta creación. Colgado por el cuello se halla, forzado a pasar una vida sujeto, encadenado, obligado...

Ciertos animales lo temen, en sus gestos inmóviles se palpa la frustración de vivir para servir. La mirada de sus ojos está ausente, y eso refleja a quien lo mira. Espanta ese rostro curtido por los factores climáticos, con la tensión inmutable de su cuerpo serviría incluso para desgarrar carne. Preparado para estar a la defensiva.

Con la escusa de proteger y hacer el bien por los demás lo tienen engañado y vive esclavizado. No conoce más allá de lo que tiene en el perímetro que le permiten ver quienes lo colocaron ahí.

No puede sonreír, sus progenitores no lo crearon para eso. Tiene que cumplir con lo que le toca, con lo que le han marcado como meta desde que nació a partir de sobras.

Sus dedos son incapaces de tocar, no sabe qué es el tacto, está acostumbrado a tentar con manos nuevas porque no conoce, pero a la vez viejas por agarrar el viento, absorber la lluvia y servir de reposadero al sol.

Puede que esto le guste, pero es que es lo único que conoce, lo único que le han enseñado.